Hace un siglo, un científico llamado Alexander Gurvich introdujo un concepto sorprendente: las células vivas emiten una tenue luz ultravioleta, invisible a simple vista, que utilizan para comunicarse entre sí y estimular procesos internos. En ese momento, su teoría fue descartada por falta de pruebas sólidas. Hoy en día, gracias a los avances en la física cuántica, las ideas de Gurwich están reviviendo y aportando nuevas y fascinantes perspectivas sobre la biología celular.
La idea revolucionaria de Gurwich: la radiación oculta
En la década de 1920, GurvichBiólogo ruso, realizó experimentos que desafiaron el pensamiento científico de su época. Observó un extraño fenómeno cuando la punta de una raíz de cebolla se colocó cerca de otra raíz.
En detalle, los investigadores observaron que se producían más divisiones celulares en el lado de la raíz expuesto a la punta. Este fenómeno parece sugerir Forma de comunicación entre células.Estimulado por ciertos tipos de luz. Sin embargo, esta luz no se parecía a la luz que usamos todos los días. Este es un Luz ultravioleta muy débil.Puede viajar a través de algunos materiales como el aire y el cuarzo, pero otros como el vidrio lo bloquean.
Gurwich llamó a este fenómeno «radiación mitogenética», sugiriendo que un tipo de radiación invisible al ojo humano desempeña un papel fundamental en la promoción de la división celular. Sin embargo, en ese momento, la idea de que la luz pudiera causar tales procesos biológicos parecía absurda y fue en gran medida ignorada.
Pasó el tiempo y la idea de Gurvich se volvió oscura hasta que nuevas herramientas científicas permitieron nuevas pruebas de esta hipótesis. Hoy en día, con los avances en la física cuántica que exploran fenómenos en los que la materia interactúa con la luz de maneras extrañas y no intuitivas, el descubrimiento de Gurvitch parece más plausible.
Física cuántica: una clave para comprender los fenómenos
Para explicar este fenómeno, los físicos modernos se han basado en la teoría. resonancia cuántica. Esta teoría se basa en la idea de que partículas como los fotones (que son cuantos de luz) pueden interactuar de maneras específicas con sistemas materiales como las células. En lugar de considerar estas interacciones como aleatorias o insignificantes, la resonancia cuántica sugiere que los fotones pueden «resonar» con moléculas o estructuras biológicas, produciendo efectos biológicos significativos.
En el caso de la radiación mitogenética de Gurwich, las células emiten luz ultravioleta. Un impacto directo y medible en su comportamiento.. Aplicando este marco teórico, los físicos propusieron que esta luz, aunque invisible y muy débil, no es sólo un subproducto o desecho de las células, sino que en realidad desempeña un papel. Papel activo en la promoción de ciertos procesos biológicos como la división celular.. En otras palabras, la luz de las células actúa como una señal cuántica que influye en otras células en lugar de ser simplemente un residuo energético.
Esta perspectiva redefine cómo entendemos la comunicación celular. Anteriormente los científicos pensaban que las células se comunicaban principalmente a través de señales químicas o físicas, propone esta teoría La luz cuántica puede ser una herramienta fundamental para la coordinación entre ellos. Más que ser un simple fenómeno energético secundario, la luz cuántica emitida por las células desempeña en realidad un papel en la regulación de sus funciones y en la activación de importantes procesos biológicos.
Implicaciones para la biología y la medicina.
La idea de que la luz es un factor importante en la comunicación celular no sólo tiene implicaciones teóricas fascinantes sino también importantes. Aplicaciones prácticas. De hecho, la luz ultradébil emitida por las células puede utilizarse como biomarcador para evaluar el estado de las células humanas. Estas emisiones de fotones ultradébiles (UPE) se pueden utilizar para detectar anomalías en las células, como signos tempranos de cáncer o estrés oxidativo.
En medicina regenerativa, este descubrimiento transformará la forma en que abordamos la curación de tejidos. El uso de fototerapias de precisión que estimulan la división celular y la regeneración de tejidos puede convertirse en una práctica común. Este enfoque allana el camino para tratamientos más específicos y personalizados, utilizando la luz para influir con precisión en los procesos biológicos de las células.
Más allá de la medicina, esta comprensión cuántica de la biología puede conducir a innovaciones en biotecnología, con la capacidad de manipular estas interacciones de la luz para mejorar procesos como la fotosíntesis o crear tipos más eficientes de catálisis enzimática.
El redescubrimiento del trabajo de Gurwich a través de la lente de la física cuántica es más que una simple rehabilitación de una idea olvidada. Esto marca el comienzo de una nueva era en nuestra comprensión de la biología, una era en la que los límites entre biología y física cuántica son cada vez más borrosos. Al explorar procesos como la mitosis o la fotosíntesis con la mecánica cuántica, los científicos ahora pueden revelar fenómenos que antes eran invisibles para los investigadores.