Mientras inspeccionaban su campo de canola, el granjero Barry Sawchuk y su hijo se encontraron con algo inusual: un trozo de metal pesado carbonizado.
La granja de Sawchuk está ubicada cerca del pequeño pueblo de Ituna en Saskatchewan, Canadá. El objeto metálico es basura espacial, probablemente de una cápsula SpaceX.
Como se informó CBCEsta pieza mide aproximadamente 6,5 pies de ancho y pesa 88 libras.
Módulo de maletero del dragón.
Las capas de metal exhibían fibras y correas compuestas carbonizadas, lo que sugería que se trataba de desechos espaciales, pero Sawchuk no estaba del todo seguro.
Después de este descubrimiento, el incidente atrajo la atención de los profesores de astronomía a través de las noticias locales.
Samantha Lawlor, profesora de astronomía en la Universidad de Regina, examinó los escombros y sugirió que los fragmentos eran en su mayoría de la nave espacial SpaceX Dragon que reingresó a la atmósfera en febrero de este año.
La cápsula devolvió a cuatro astronautas de una misión privada Ax-3 en la ISS.
Dragon se desacopló el 7 de febrero y la tripulación regresó a la Tierra el 9 de febrero. La cápsula reutilizable de la tripulación salpicó de manera segura frente a la costa de Daytona, Florida, pero se dejó que el módulo troncal desechable volviera a entrar por sí solo. Este módulo troncal puede estar en la granja de Barry.
De acuerdo a esto CBCUn granjero canadiense planea vender chatarra y donar las ganancias para ayudar a construir un estadio de hockey en Saskatchewan.
Según el derecho espacial internacional, los países deben devolver todos los desechos espaciales al país de origen. Esto significa que los restos encontrados en la granja de Barry deberían técnicamente devolverse a los Estados Unidos, donde tiene su sede SpaceX. Sin embargo, SpaceX puede decidir simplemente entregar basura espacial.
En julio de 2022, ocurrió un incidente similar cuando el módulo troncal Dragon de SpaceX aterrizó en tierras de cultivo australianas.
El creciente problema de la basura espacial
Según la Agencia Espacial Europea (ESA), cada año vuelven a entrar en la atmósfera terrestre entre 200 y 400 objetos fabricados por el hombre, como satélites fuera de servicio y etapas de cohetes perdidas. Aunque la mayor parte de este material se quema al reingresar, algunas fracciones grandes pueden sobrevivir y regresar a la Tierra.
La hipótesis actual implica que existe una posibilidad mínima de que cualquier devolución incontrolada cause daños o accidentes. Pero esto no se ha descartado del todo.
Otro incidente que destaca la creciente amenaza de los desechos espaciales son los restos de paletas de baterías desechadas por la ISS de la NASA que se estrellaron dentro de una casa de Florida. Los escombros podrían haber alcanzado fácilmente a los ocupantes, pero estos escaparon por poco.
SpaceX continúa lanzando más misiones año tras año, lo que indica que los desechos espaciales no harán más que aumentar. Según estimaciones de la ESA, actualmente hay más de 36.500 objetos basura en nuestra órbita. Dado que la industria espacial se expande a un ritmo exponencial, existe una mayor probabilidad de verse afectado por esos desechos espaciales.
Mientras tanto, SpaceX aún no ha confirmado que la basura pertenezca al Dragón.
A medida que avanza la exploración espacial, ¿quién sabe dónde aterrizará el próximo trozo de basura espacial?
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dijo la bestia Mrigakshi es un periodista científico al que le gusta escribir sobre exploración espacial, biología e innovaciones tecnológicas. Su experiencia profesional abarca tanto medios audiovisuales como digitales, lo que le permite aprender una variedad de formatos de narración. Su trabajo ha aparecido en publicaciones de renombre como Nature India, Supercluster y la revista Astronomy. Si tiene propuestas en mente, no dude en enviarlas por correo electrónico.